El reto para 2024, en un mercado aletargado que lucha por recuperar su equilibrio, es actuar para impulsar el crecimiento en volumen, aumentar la afluencia y ampliar la cuota de mercado, todo ello al tiempo que se mejora la agilidad y la resistencia del propio negocio.
Los últimos años han demostrado sin lugar a duda que todo puede suceder y que los retailers deben asegurarse de que cuentan con las herramientas necesarias para reaccionar con rapidez cuando suceda.