La inexistencia de stock en la tienda tiene consecuencias para todos los integrantes de la cadena de suministro: el consumidor final se frustra porque no encuentra lo que busca y distribuidor y fabricante no consiguen su objetivo, vender. Por tanto, la colaboración es esencial para la mejora de los niveles de servicio y la disponibilidad en el lineal de los productos.
En el marco del 6º Congreso AECOC de Administración Comercial, Helena Figueira, Customer Coordinator de Nestlé Portugal, subrayó la importancia y aplicación de la estrategia OSA (On-Shelf Availability) en una compañía líder mundial.
Garantizar que no haya falta de mercancía solo es posible con la sintonía y colaboración entre fabricante y distribuidor. El objetivo final siempre es la satisfacción del clientes, donde es clave “buscar la ruta que causa los problemas en la tienda y saber que la podemos resolver para mejorar nuestro negocio con los clientes”.